Todo comienza cuando Batman encuentra en su cuartel general un objeto que los seguidores de DC Comics conocen perfectamente: una chapa ensangrentada. Pero ¿cómo ha llegado ahí el objeto con el que empezó la trama de Watchmen? El Caballero Oscuro, el mejor detective del mundo, pide ayuda a Flash, el mejor policía forense del planeta, para resolver un misterio que recorre el espacio y el tiempo. ¿Quién habrá dejado ahí ese regalo envenenado? Lo cierto es que están a punto de averiguarlo, ya que la batcueva va a recibir una visita que catalizará una aventura crucial de estos dos héroes que también tendrá una gran importancia en el futuro inmediato de todo el Universo DC.
Tom King, guionista habitual de Batman que también nos ha deslumbrado con obras como Mr. Milagro o El sheriff de Babilonia, une fuerzas con Joshua Williamson, el actual escritor de Flash. Conocido hasta hace poco por su faceta de autor independiente, ha demostrado con el Velocista Escarlata un gran dominio de los superhéroes que ha extendido en fechas más recientes a la flamante Batman/Superman. Del dibujo de este volumen se ocupan Jason Fabok, conocido por haberse ocupado de sagas cruciales de la Liga de la Justicia como La guerra de Darkseid, y Howard Porter, uno de los autores más aclamados de la historia del Velocista Escarlata y de la propia JLA.