Fuuko Izumo quiere morir. Desde que sus padres fallecieron en un accidente cuando era niña, sabe que cualquiera que toque su cuerpo sufrirá una inmensa mala suerte. Por eso, con apenas 18 años, está preparada para saltar a las vías del tren. Pero, antes de que lo haga, le detiene un misterioso hombre corpulento... que resulta ser un no muerto. Intrigado por el poder de la chica, le pide que le muestre cómo funciona, pues está interesado en usarlo en su beneficio ya que es inmortal. Pronto las cosas se complicarán aún más cuando sean perseguidos por una organización que busca controlar a personajes «especiales» como ellos. Pase lo que pase, y a pesar de que se acaban de conocer, ambos permanecerán juntos para superar todos los contratiempos que aparezcan.
